Ir Arriba
„Immer ist es so gewesen und wird immer so sein, daß die Zeit und die Welt, das Geld und die Macht den Kleinen und Flachen gehört, und den andern, den eigentlichen Menschen, gehört nichts. Nichts als der Tod." / "Siempre ha sido así y así siempre será, que el tiempo y el mundo, el dinero y el poder pertenecen a los mediocres y superficiales, y a los otros, a los verdaderos hombres no les pertenece nada. Nada más que la muerte"

Hermann Hesse




Me dan miedo los intelectuales

Me dan miedo los intelectuales. A mi juicio, son como retratos. Observarles provoca en mí la sensación de que están mirándome, atentos a todo lo que se mueve en mí: el sudor de mis manos, mi trago de saliva, los nervios pues. Y de pronto ¡zas! se mueve la imagen: le da un trago a su taza de café, o le da una fumada a su cigarro, o se acomoda los lentes; y sus ojos se vuelven a posar en mí. Entonces sí, aquí es donde me carga la chingada, porque sus ojos son inescrutables, impenetrables. Ahí está esa mirada odiosa que lo sabe todo, ahí la presencia antipática, erudita, librepensadora e intelectualoide, y eso que sus labios aún no se han abierto más que pa’ tomar café o darle el golpe al cigarrito. Eso sí, más vale seguirlos imaginando como los imaginé al principio, como retratos, ahí quietecitos por favor, ahí nomás, pintados, míralos, qué bonitos se ven ¡hasta da gusto! Pero no. He de abrir mi bocota, he de invitar al retrato a que cobre vida, a que termine devorándome y quitándose mis restos de entre sus dientes con un palillo, si es que alguien lo insinúa: tienes un poco de mierda entre los dientes.
En fin, mea culpa, yo por preguntar, yo por sentirme suficiente, por querer enfrentar mis temores. ¡Nada, nada! Puras patrañas ¡Cómo se me ocurre! Si ellos lo saben todo, carajo… ¡todo! Se les satura la mente de conocimientos, la boca se les atasca de vocabulario rebuscado y muy ambiguo y muy… pues muy acá. Y que cualquier sinvergüenza como yo se les ponga al tú por tú, está algo difícil. Ahora bien, un verdadero sin-vergüenza no soy, porque la mera verdad vergüenza sí me da, o sí tengo pues, y más cuando estoy ahí parado frente al intelectual, quien rebosa de discernimientos y los expone elocuentemente en sus interminables bla, bla, bla; ahí yo, paradote, calladote, y el resto del mundo interpretando mi silencio como suele interpretarse el silencio de los tontos, a la manera de éste ni sabe nada, éste ni entiende. Bien, no me importa demasiado, por lo menos los tontos todavía tenemos la oportunidad de aprender algo, sin embargo el intelectual es Dios, y a ver ahora quién le enseña. Total, serán omniscientes, pero no invencibles. Pueden de hecho ser admirados (admirables) genios, maestros, muy letrados, muy cultivos —cultivados pues, al caso sigue siendo lo mismo—; yo nomás sé que a mí, a mí me dan miedo los intelectuales.

0 comentarios:

¿Qué te pareció la entrada?

Barroco

Radio UNAM AM     Radio UNAM FM     Opus 94.5 FM

A través de este formato puedes comunicarte conmigo; para hacerlo, sólo cierra la ventana que se despliega y listo. Este blog está abierto a recibir cualquier tipo de comentario (sin restricciones) para mejorar, corregir y aumentar su contenido.(Nota:actualmente la forma no resetea usando mozilla y requiere doble "Enviar" usando Chrome)
Comenta, critíca, aporta...

Nombre:


E-Mail:


Website


Comentario

 
Subir a Inicio